01 mayo 2014

Reseña: Memorias de un amigo imaginario.

Título original: Memoirs of an imaginary friend 
Autor: Matthew Dicks 
Editorial: Nube de tinta 
Año: 2011 
Nº páginas: 430 
Precio: 16.95

Puntuación: 5.8/5 

Sinopsis: Max solo tiene 8 años y no es como los demás niños. Él vive para dentro y cuanto menos le molesten, mucho mejor. No le gustan los cambios, las sorpresas, los ruidos, que lo toquen ni que le hagan hablar por hablar. Si alguien le preguntara cuándo es más feliz, seguro que diría que jugando con sus legos y planeando batallas entre ejércitos enemigos. Max no tiene amigos, porque nadie lo entiende y todos, hasta los profesores y sus propios padres, quieren que sea de otra manera. Solo me tiene a mí, que soy su amigo desde hace cinco años. Ahora sé que Max corre peligro y solo yo lo puedo ayudar. El problema es que Max es el único que puede verme y oírme. Tengo mucho miedo por él, pero sobre todo por mí. Los padres de Max dicen que soy un amigo imaginario. Espero que a estas alturas tengas claro que no soy imaginario. 

Estamos ante una de mis mejores lecturas del 2012, si no la mejor. Con ella, nos adentramos en el mundo de los amigos imaginarios, tan reales como las personas (y digo personas, y no niños) que los crean. Pero, cuando su existencia se debe a la imaginación de un niño, estos amigos son todo ternura, y su comprensión del mundo prescinde de todo lo accesorio para ir directa a la verdad.

Budo es el amigo imaginario de Max y narra la historia, por lo que a través de él podemos conocer los pensamientos de este niño. Max es especial, pues presenta cierto grado de autismo. Por tanto, a lo largo de la historia, veremos las cosas desde el peculiar punto de vista de alguien que padece esta mal denominada ''enfermedad''. Puedo asegurar que, al acabar el libro, deseas que todas las personas del mundo sean autistas (al menos, en un grado como el de Max). Igual de metódicas, igual de inteligentes, igual de curiosas, igual de creativas. No hacer ni decir nada que no sea imprescindible. Todo sería mucho más sencillo. 

Sin embargo, no es un libro de autismo. Se trata de una situación real, una aventura o, mejor dicho, un problema que Budo tendrá que solucionar a pesar de las limitaciones impuestas por su condición de imaginario. Un libro lleno de amor y ternura, con un desenlace que hará llorar, aunque no de tristeza, a las almas más sensibles. 

Deja de leer esto, ve a tu librería más cercana y cómpralo. 

 - No tendrías que preocuparte por ti mismo. Es posible que salvándolo a él te salves tú, pero eso no importa. 
- ¿Te morirás cuando Grace se muera? 
- Creo que sí. Eso espero.